Los animales de circo, son forzados a pasar la mayor parte de sus vidas en pequeñas jaulas y únicamente son sacados por poco tiempo, para actuar. En las giras, visitan alrededor de 150 ciudades en un año, y una provisión de agua limpia o la comida no siempre se encuentra en cada localidad, se limita el agua y la comida a los animales, y la limpieza de éstos y sus jaulas se posterga, actuando contra aquellos animales, como los elefantes, que les gusta bañarse muy seguido, como lo hacen en su libertad.
Los calurosos días de verano son una tortura para animales como los osos, mientras que otros, como los leones, sufren sobremanera en los meses de invierno. Durante el período que los circos están fuera de temporada, los animales son mantenidos en las mismas jaulas donde son transportados , muy pocos circos tienen los recursos o la voluntad de poner dinero en refugios para estos animales, esto provoca en los animales graves daños tanto físicos y psicológicos.
Desde hace mucho tiempo el metodo de entrenamiento es el castigo, algunos animales son drogados para volverlos más maleables, mientras que a otros se les quitan los dientes. El entrenador de animales, Pat derby, comenta: “después de 25 años, observando y documentando circos, sé que no existen entrenadores bondadosos”. Un empleado dijo: “era una dulce osa color café que nunca había lastimado a nadie, pero tenía problemas manteniendo el equilibrio en la cuerda floja, solía recibir tremendos golpes que le propinaban los entrenadores con varas de metal, mientras sangraba y gritaba. Se volvió tan neurótica que constantemente golpeaba su cabeza contra los barrotes de su jaula. Terminó muriendo.”
Los trucos que los animales son forzados a ejecutar: osos balanceándose en pelotas, monos manejando motocicletas, y elefantes parándose sobre sus patas traseras, son anti naturales. Las herramientas utilizadas: látigos, collares de ahorque, y ganchos de metal, confirman esta teoría.
Este tipo de actos no educan sobre el comportamiento natural de los animales, cuando los animales ya no sirven, son confinados en jaulas, vendidos a circos, a zoológicos, a cotos de caza privados, y a laboratorios para experimentar con ellos. Por lo general terminan sus días de la misma de siempre, con dolor y miseria.
¿Cómo podemos ayudar nosotros?
- Abolir los espectáculos con animales aumentará la demanda por artistas y actores humanos. Protesta contra los circos y trata de impedir que se instalen en tu zona. - No visites circos que utilizan animales. Lleva a tu familia sólo a circos libres de crueldad. - Haz una mesa educativa y reparte folletos con información. - Infórmate sobre las normas y leyes locales que protegen a los animales. Haz la denuncia en caso de veas irregularidades.
Fuente: http://www.uva.org.ar
Los calurosos días de verano son una tortura para animales como los osos, mientras que otros, como los leones, sufren sobremanera en los meses de invierno. Durante el período que los circos están fuera de temporada, los animales son mantenidos en las mismas jaulas donde son transportados , muy pocos circos tienen los recursos o la voluntad de poner dinero en refugios para estos animales, esto provoca en los animales graves daños tanto físicos y psicológicos.
Desde hace mucho tiempo el metodo de entrenamiento es el castigo, algunos animales son drogados para volverlos más maleables, mientras que a otros se les quitan los dientes. El entrenador de animales, Pat derby, comenta: “después de 25 años, observando y documentando circos, sé que no existen entrenadores bondadosos”. Un empleado dijo: “era una dulce osa color café que nunca había lastimado a nadie, pero tenía problemas manteniendo el equilibrio en la cuerda floja, solía recibir tremendos golpes que le propinaban los entrenadores con varas de metal, mientras sangraba y gritaba. Se volvió tan neurótica que constantemente golpeaba su cabeza contra los barrotes de su jaula. Terminó muriendo.”
Los trucos que los animales son forzados a ejecutar: osos balanceándose en pelotas, monos manejando motocicletas, y elefantes parándose sobre sus patas traseras, son anti naturales. Las herramientas utilizadas: látigos, collares de ahorque, y ganchos de metal, confirman esta teoría.
Este tipo de actos no educan sobre el comportamiento natural de los animales, cuando los animales ya no sirven, son confinados en jaulas, vendidos a circos, a zoológicos, a cotos de caza privados, y a laboratorios para experimentar con ellos. Por lo general terminan sus días de la misma de siempre, con dolor y miseria.
¿Cómo podemos ayudar nosotros?
- Abolir los espectáculos con animales aumentará la demanda por artistas y actores humanos. Protesta contra los circos y trata de impedir que se instalen en tu zona. - No visites circos que utilizan animales. Lleva a tu familia sólo a circos libres de crueldad. - Haz una mesa educativa y reparte folletos con información. - Infórmate sobre las normas y leyes locales que protegen a los animales. Haz la denuncia en caso de veas irregularidades.
Fuente: http://www.uva.org.ar
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